viernes, 26 de febrero de 2010


Ja! tantas idas y vueltas, que si me voy, que si me quedo... aca estoy, aca me tienen! aterrizando en Israel.
La cuestión fue mas o menos la siguiente:
ezeiza, todo muy lindo, despido a mi familia, me alejo de ellos para empezar con el pre-embarque cuando de golpe me doy vuelta, lo miro a Adrián y le digo... "y ahora que tengo que hacer?".
Pasó el pre-embarque, las 28 vueltas por el free-shop, el embarque, nos ubicamos en el avión (últimos dos asientos, pegadito al baño!), se prenden las luces del avión, las pantallitas, nos pasan el video con las medidas de seguridad cuando de golpe.... se apaga todo! y pasa una azafata corriendo diciendo "se ha caido el sistema". nada del otro mundo! se cayó el sismema eléctrico del avión y junto a él un aparatito que mantiene el motor prendido pero todos nos tranquilizamos cuando el comandante dijo por altoparlante "ha sido un inconveniente técnico, pero ya lo estamos solucionando y en seguida podremos despegar". Finalmente cuando todo comienza nuevamente su funcionamiento y yo ya estaba pudiendo dejar de comerme las uñas y parar de treparme del techo del avión, adivinen que? si! el sistema se cae nuevamente!
en cuestión de minutos se solucionó y no pasó a mas que escuchar a algún señor decirle a la azafata "si se apaga una vez mas yo me bajo!".
En fin... despegamos! viaje largo, dormi un poco, escuche mucha música, comí poco y a las doce horas estabamos aterrizando en Madrid.
Frenó el avión, todos nos paramos como para bajarnos cuando el comandante con su tonada española dice "hola, les habla nuevamente el comandante a bordo, hemos tenido un pequeño inconveniente, nos guíaron mal para ubicarnos, estamos 2mts mas atrás y no llegan a poner la rampa... tenemos que esperar unos minutos que vengan a empujarnos". Eso no hubiese sido nada si no hubiera hablado a los 15 min para decirnos "disculpen, sentimos mucho lo que está sucediendo, pero tiene que llegar un tractor para empujarnos y no llega, esperamos en unos minutos poder estar desembarcando."
Paso un rato y ya nos encontrabamos en Barajas siguiendo a la mayoría de la gente sin tener la menor idea de donde estabamos.
Una vez ubicadas nos encontramos frente a una persona dentro de la aerolínea elal que nos empieza hablar en hebreo... ehh? todavía estoy en España y ya tengo que hablar Hebreo. y es allí cuando ni doce años de escuela hebrea te ayudan para poder sacar una palabra de tu boca. en fin, tambien sabía español el muchacho.
Nuevamente Free-shops, seciones de fotos en Barajas, nos embarcamos en elal... y después de ahí no me pregunten nada. No escuche ni el despegue del avión. Me dormí, me desperté cinco minutos para comer, me volví a dormir y me desperté en Tel Aviv.
Ahora sí, ya en puerto. Estoy muy bien, muy contenta.
Escribiré en cuanto tenga mas para contar!
un beso grande!